martes, 31 de diciembre de 2013
Llegó el día.
viernes, 29 de noviembre de 2013
A veces, sucede.
domingo, 17 de noviembre de 2013
Del que eras al que ya no encuentro.
viernes, 11 de octubre de 2013
Hasta aquí.
jueves, 26 de septiembre de 2013
Infierno sostenido.
domingo, 22 de septiembre de 2013
Crónica de un sentimiento.
domingo, 15 de septiembre de 2013
You always hurt the one you love.
martes, 10 de septiembre de 2013
No estás, pero tampoco te has ido.
lunes, 29 de julio de 2013
Lo que mi voz dijo un día.
A veces pienso si realmente vale la pena salir de aquí. Ya son nueve meses dentro del vientre de mi madre y estoy demasiado cómoda. Además, el hecho de saber lo que me espera ahí fuera disminuye mis ganas de conocer el mundo. Bueno, tampoco voy a ser demasiado dramática. No peso ni tres kilos y ya me comporto como si fuera adulta. Deben ser los efectos sedantes del cordón umbilical. Lo que os iba a contar, que me voy por las ramas, es un secreto que todo el mundo conoce pero del que nadie se acuerda. Yo, criatura a la que le quedan horas e, incluso, minutos para nacer, puedo permitirme recordároslo. Haced memoria. ¿No os ha pasado alguna vez que tenéis la sensación de haber vivido ya algo? Sí, eso que los expertos llaman déjà-vu. Pues bien, no os creáis nada de lo que os expliquen mediantes teorías científicas. La verdadera razón de tener esas extrañas experiencias es porque de fetos ya sabemos todo lo que va a pasar en nuestras vidas. Ya me imagino las caras que estáis poniendo, pero es totalmente cierto. Aunque no lo recordéis, vosotros también os habéis encontrado en mi situación. Por ello, algunos no querríais salir de la inmensa barriga de vuestra madre y otros, sin embargo, estaríais deseosos de ver la luz.
lunes, 4 de marzo de 2013
En diferido
jueves, 28 de febrero de 2013
Una vez alguien escribió esto...
martes, 19 de febrero de 2013
Fold it.
No con él. Ya lo hará sola. Algún día...
miércoles, 13 de febrero de 2013
Non plus.
domingo, 3 de febrero de 2013
Tan solo necesitaba su sonrisa para iluminar el mundo.
lunes, 28 de enero de 2013
M de reproche.
de luna llena.
miércoles, 23 de enero de 2013
Cenizas.
Como dos desconocidos que no saben cómo tratarse. Como si cuatro años hubieran desaparecido de repente. Y solo quedaran los restos de lo que un día fuimos.
Me paro a pensar y no encuentro el punto exacto en que nos descarrilamos. Quizá es que en la vida real no existen puntos de inflexión definidos. Todo ocurre deprisa y sin avisar. Nos pilla desprevenidos e indefensos.
Cierro los ojos y la duda me invade por un segundo. Parece que fue ayer cuando me di la vuelta y le sonreí por primera vez. Luego abro los ojos y siento que ha pasado una eternidad. Agridulce contradicción.
Y soy sincera. Nos echo de menos. Cuando éramos felices. Cuando él me completaba. Cuando un simple beso era suficiente. O una media noche a duermevela con ese olor que ya se está evaporando.
Ahora nada es suficiente. Ni su espalda ni mi sonrisa. Y solo quedan las cenizas de lo que antes era fuego. Dispuestas a que alguien las recoja y les dé un sitio. Pero aún es demasiado doloroso. Y yo ya no soy tan fuerte como antes.
martes, 8 de enero de 2013
So special.
Que la vida ya es demasiado complicada y el camino largo, como para preocuparse por una parte de nosotros que ya tenemos. Desde que aprendimos a tomar decisiones, a elegir nuestro camino.
Somos una unidad. Enteros. Únicos.